domingo, 17 de julio de 2016

Es una gran tristeza y una cruel realidad


No permitámos que sigan sufriendo los niños así, ellos no tienen culpa que algunos funcionarios se roben lo que en realidad le pertenecen a ellos






Es muy triste observar por las calles o avenidas a muchos niños en estas condiciones, descalzos, con sus ropitas rotas, desnutridos y con unas caritas llenas de humildad y de tristeza.


Ellos también tienen que luchar para poder tener para un taco que comer y agüita que tomar, para ellos no hay descanso alguno, no hay festejos de cumpleaños o navidad.


La cruel necesidad los obliga a trabajar bajo el fuerte sol y muchas veces bajo la lluvia.


Para estos pobres niños no  existen juguetes, desde muy temprana edad aprenden a trabajar, a cargar cosas pesadas y a perder la vergüenza ante la gente que los observa.


Qué triste en verdad, pero que hacen o que han hecho las autoridades de los tres niveles de gobierno?


En donde están los recursos económicos que se destinan para apoyar y ayudar a estos angelitos?


Son preguntas que quizás nunca tengan respuestas algunas, pero hoy que la sociedad ha despertado, es el momento de alzar la voz y pedir por estos inocentes niños, que no tienen la culpa de sufrir por culpa de algunos funcionarios que se roban lo que les pertenece.


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