jueves, 28 de diciembre de 2017

Inocente palomita, no dejes que te engañen, te explicamos el origen de este tradicional día


CIUDAD DE MÉXICO, 28 de diciembre (AlmomentoMX).- Estamos a pocos días de que este 2016 concluya y como cada año, ha llegado el mítico Día de los inocentes, sí, sí, el día perfecto para bromear a tu jefe, la abuelita, o a ti mismo diciéndote que el próximo año sí vas a cumplir el propósito de bajar de peso o comenzar a ahorrar, sin embargo, ¿sabes cuál es el origen de este día?

Este día tiene un origen religioso, mismo que recuerda la muerte de cientos de niños menores de dos años en Belén por órdenes del rey de Judea, el rey Herodes, quien al enterarse de la visita de los Reyes Magos a Jesús, el monarca quiso acabar con este “nuevo rey” y ordenó la matanza. Por años, Herodes creyó que su cometido se había cumplido y es de ahí que en la actualidad se trate de engañar a otras personas.

Como toda tradición tuvo sus modificaciones y ajustes para conocerla como hoy día la conocemos.
Convención religiosa

Cuando la Iglesia Católica se convirtió en la religión oficial del Imperio Romano, ésta reemplazó progresivamente las fiestas paganas por celebraciones cristianas. Tal es el caso de la Navidad en el 25 de diciembre, fecha en la que antes de festejaban las saturnales, dedicadas al dios romano Saturno.

Celebraciones que se extendían hasta inicios de enero e incluían, a modo de celebración, una “subversión del orden”, un “mundo al revés”. Este fue a su vez un tópico común en la cultura medieval.

Esta tradición se extendió, precisamente hasta la Edad Media en Europa, donde se celebraban fechas como “la fiesta de los locos” en la misma época del año. Es en esta época cuando la Iglesia Católica decidió establecer el día 28 de diciembre como el Día de los Inocentes y combinarlo con “la fiesta de los locos” y así calmar las excentricidades de los participantes.

En países como Estados Unidos, Alemania, Japón y Brasil celebran esta fecha el 1 de abril, conocido como Fool’s Day o el Día de los Tontos, pues cuando el papa Gregorio XIII ordenó adaptar el Calendario Gregoriano, con el que el Día de Año Nuevo se movía de finales de marzo al 1° de enero.

En nuestro país esta tradición vivió su apogeo en la década de los sesenta, cuando la población aún se caracterizaba por ser ingenua y voluntariosa, pues cuando le pedían prestado algo en esa fecha debían hacer una reunión o fiesta con toda la comunidad para recuperarlas.

Así que ya sabes, que el hoy no te apliquen el: Inocente palomita que te dejaste engañar, sabiendo que en este día nada se debe prestar.

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