Lo más destacado del XIX Seminario Internacional “Los partidos y la nueva sociedad” fue la condena unánime de los 132 partidos políticos de 40 países a lo que definimos como injerencia de los Estados Unidos en Venezuela: Morales Beiza

* Solidaridad total con Venezuela

La delegación quintanarroense fue compuesta por 24 militantes petistas, encabezados por el comisionado estatal y diputado local, Hernán Villatoro Barrios, asimismo entre ellos asistieron los regidores de Bacalar, Rivelino Valdivia Villaseca y Arturo Calderón Gómez y Othón P. Blanco Miguel Morales Beiza   

Por José Luis Barrón

CHETUMAL, Q. ROO.- Los representantes de más de 40 países, embajadores, organizaciones y partidos políticos de izquierda y progresistas, que participamos en el XIX Seminario Internacional “Los partidos y la nueva sociedad” nos solidarizamos con el pueblo venezolano y el presidente Nicolás Maduro ante la ofensiva imperialista de los Estados Unidos y Barack Obama, así lo dio a conocer el miembro de la Comisión Ejecutiva Estatal del Partido del Trabajo (PT) en Quintana Roo, Mauricio Morales Beiza.

Abundó que en este seminario de relevancia mundial fue una plataforma de debate y de construcción de acuerdos y proyectos que abonen a la paz y al bienestar de todas las naciones, por lo que el decreto emitido por Barack Obama en el que califica al país sudamericano de constituir una amenaza inusual y extraordinaria a la seguridad nacional estadounidense es inadmisible.

En ese sentido, dijo Morales Beiza, “Venezuela y su revolución, no está sola. Todos somos Venezuela, todos somos Chávez, todos somos Nicolás Maduro y estaremos las fuerzas de izquierda y progresistas con ellos presentes para defender la Revolución Bolivariana”.

En este magno evento de las izquierdas y fuerzas progresistas del mundo, donde estuvieron presentes 24 militantes del PT Quintana Roo, encabezados por el comisionado estatal y diputado Hernán Villatoro Barrios, se abordaron durante los tres días temas como la contra ofensiva del imperialismo contra los gobiernos y los proyectos alternativos de nación, la crisis de la unipolaridad, los procesos de paz en el mundo y los golpes de estado de nuevo tipo.

Mauricio Morales Beiza también indicó que otro tema importante fue el expuesto por el ex presidente de Honduras, Manuel Zelaya Rosales (derrocado por un golpe de estado en 2009, bajo el auspicio de los Estados Unidos) quien advirtió que con la reciente declaración del presidente norteamericano Barack Obama, en contra del pueblo de Venezuela y su presidente Nicolás Maduro, está en riesgo la conquista de la humanidad por tener patria, por conquistar soberanía, por tener democracia y por la lucha por la paz.

Por lo que, agregó el entrevistado, coincidimos que es una declaración pública agresiva en contra de toda Latinoamérica, atacando cierto a un país, pero donde nos sentimos atacados absolutamente todos, reconoce el carácter imperialista de los Estados Unidos, de injerencia, de irrespeto a la autodeterminación de nuestros pueblos.

En tanto que Alberto Anaya, coordinador nacional del PT, manifestó que desde años los norteamericanos buscan la “des esterilización” al igual que lo hicieron con el gobierno de Salvador Allende y preparan las condiciones para un golpe de estado de nuevo tipo.

Recientemente, agregó, las declaraciones de Obama fueron no sólo una advertencia sino una amenaza que busca convertirse en acciones intervencionistas en las que no se deja de lado la posibilidad de una agresión militar.
Otro punto digno de comentar, dijo el ex diputado petista en Quintana Roo, es el proyecto del canal interoceánico que garantizará la independencia económica de Nicaragua, que presentó Carlos Fonseca Terán, secretario de Relaciones Internacionales del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).

El Gran Canal es la afirmación de la soberanía de ese país frente a las pretensiones históricas del imperialismo y Washington conoce las consecuencias inmensamente favorables que tendrá para el sandinismo la realización de esta colosal obra ya que el canal puede garantizar la independencia económica de Nicaragua, cuyos ingresos dependen de sus insuficientes materias primas y recursos naturales.